El pasado 21 de diciembre de 2009, fue un día pletórico de emociones en nuestra Colación de Grado de la Universidad Pública de El Alto. Fueron 56 los titulados……quienes cruzaron la “delgada línea roja “que separa la condición de estudiante de educación superior a la de flamante profesional.Cabe mencionar de manera muy especial a los primeros titulados en CIENCIAS DE LA COMUNICACIÓN SOCIAL, JAVIER CORTEZ y RAUL CATARI.Los mencionados fueron fundadores de esta casa superior de estudios, quienes empezaron su formación académica en un periodo caracterizado por la crisis institucional y por consiguiente un natural sentimiento de incertidumbre. La lucha denodada por obtener el ideal, puede resumirse como de BRILLANTE, al contribuir estos estudiantes a conseguir la AUTONOMIA, mediante la Ley 2556 el 12 de noviembre de 2003 en el Gobierno de transición de Carlos Mesa.La UPEA fue la institución que “prendió la mecha” en 2002, primero con su objetivo primordial de conseguir su AUTONOMIA y posteriormente…….ya con la insurrección general y de los movimientos sociales……..haciendo suyas las demandas de interés nacional……entre las más importantes, la nacionalización de las empresas capitalizadas, durante el periodo neoliberal.Efectivamente fue constante y de modo perseverante el “desgaste” y la presión que provocó la UPEA, al gobierno de entonces……la segunda administración de Gonzalo Sánchez de Lozada…..todo ello traducido en un centenar de marchas, bloqueos y otras medidas de presión………todo ello ampliamente justificado con cientos de miles de estudiantes imbuidos de una determinación férrea y un espíritu indomable.
CRONOLOGÍA BREVE DE RAULHace un buen tiempo ignoré el estudio. Desde muy niño trabajé y viví en las calles de casi toda Bolivia, lustrando, lavando y vendiendo. Tuve que dedicarme al comercio en las calles, para terminar mis estudios superiores. Combiné como muchos el trabajo y estudio. Por eso, quedar ausente de aquella gran fiesta académica del 21 de diciembre del 2009, hubiese sido subestimar todo ese esfuerzo. El título, que es como un trofeo dorado, me lo gané con lágrimas, sudor, sangre, mucho desgaste físico, inversión económica y valioso tiempo. Eso, si, el leer fue un manantial de diversión. Y para que la memoria no lo olvide, en los albores de nuestra vida universitaria pasamos clases, en piedras, ladrillos y palos. Muchas veces en el patio y sin ningún medio didáctico que pueda reforzar la enseñanza. Y no olvidaré nunca cuando la UPEA me recibió con los brazos abiertos en una tarde ardiente de agosto del 2001.En el proceso de la fundación, conquista y consolidación de nuestra autonomía universitaria fuimos prominentes activistas de la carrera y de la universidad. ¿Cómo? Con resguardos, marchas, caminatas, piquetes, siendo resistentes a la represión de la derecha cavernaria liderada por Banzer y “Goni”. Empero, más allá de que en nuestro camino a la titulación hayamos vivido días de calvario y noches de insomnio, lo importante es haber aprendido mucho sobre la vida social, y alcanzado el titulo profesional. El trabajar y estudiar a la vez...