DANZAS AUTOCTONAS DE BOLIVIA
Algunos dicen que la música es el lenguaje del alma, que con
ella se puede comunicar y expresar sentimientos sin mencionar palabra alguna.
Como bien cultural y como lenguaje y medio de comunicación
no verbal, la música constituye un elemento de valor incuestionable en la vida de las
personas; pero además la educación musical tiene gran influencia en el
desarrollo integral de los individuos: interviene en su formación emocional e
intelectual; fomenta el desarrollo de la percepción, la sensibilidad estética y
la expresión creativa.
Nuestra cultura, conjunto de tradiciones, creencias y
costumbres muy arraigada en nuestra
sociedad, en el pasado con mucha más originalidad, que en el presente, por el
dinamismo de las políticas económicas sociales y culturales, han definido su
manera de comunicarse e interactuar a
través de la música. La pérdida de identidad por influencias externas, los medios de comunicación, han
marcado estereotipos a las nuevas
generaciones, impactando al límite de negar las tradiciones y costumbres que
realizaban en cada estación del tiempo guiados por las estaciones del tiempo,
cosmovisiones andinas, la evolución constante ha afectado de manera inevitable
la personalidad del individuo, la cultura hoy en día es menos importante en la vida de las personas.
En la actualidad tendríamos que preservar y revalorizar
nuestra cultura ya que en el Art. 31 del Capítulo cuarto de la Constitución
Política del Estado afirma “Las naciones y pueblos indígena originarios en
peligro de extinción, en situación de aislamiento voluntario y no contactados,
serán protegidos y respetados en sus formas de vida individual y colectiva” es
por ello que de ahí nace nuestra presente trabajo donde se quiere mostrar
nuestra cultura como identidad personal.
De la misma manera nos sustentamos los Artículos 99, 100 y 101 de la
III Sección del Sexto Capítulo de nuestra Constitución Política del Estado
donde afirma que “El estado es responsable de preservar, desarrollar y difundir
las culturas, siendo la danza como un patrimonio de una cultura” Es de ahí que
se quiere compartir algunas danzas autóctonas de nuestra querida Bolivia: Suri Sicuris de Italaque, khantus, tarqueada
y quena quena.
Estas actividades de
interpretación responden a las necesidades expresivas individuales y colectivas
y también al placer de participar y hacer música en grupo fomentando con ello
la mejora de la autoestima, la autonomía, la responsabilidad y los valores sociales.
El principal objetivo de este trabajo es llegar a conocer más nuestras propias culturas, la vestimenta que utilizan, la manera en que bailan sus respectivas danzas, el significado de su vestimenta y su baile, y saber más acerca de su origen.
El principal objetivo de este trabajo es llegar a conocer más nuestras propias culturas, la vestimenta que utilizan, la manera en que bailan sus respectivas danzas, el significado de su vestimenta y su baile, y saber más acerca de su origen.
DANZAS AUTÓCTONAS
Bolivia se caracteriza por su diversidad con centenares de
danzas ancestrales, autóctonas, folklóricas y que continúan en constante
creación, destacando la relación ritual-ancestral de los pueblos indígenas
originarios que forma una de las principales características de la riqueza
cultural del país.
"La diversidad cultural en Bolivia se expresa en los 36
pueblos indígena originario campesino, un punto de partida para poder hablar de
la danza ya que cada una de estas culturas posee formas de expresión ancestral
y que ha influenciado de manera directa casi en la mayoría de las creaciones de
nuevas danzas contemporáneas en lugares urbanos".
Las danzas autóctonas parten de un ritual caracterizado por
diferentes acciones, mismas que tienen relación con el medio ambiente y la
producción, entre otras, expresándolas como un medio de comunicación que ha
traspasado las barreras culturales, políticas y étnicas, influyendo fuertemente
las nuevas generaciones o en los artistas urbanos.
En el IV festival Intercultural de Música y danza Autóctona
del departamento de La Paz se hicieron presente unos 28 danzas con el objetivo
de visibilizar bailes que han sido olvidados del imaginario en las entradas. En
el palco oficial se encontraban autoridades como el presidente Evo Morales.
“Toda danza y música viene como una recuperación de nuestras músicas
originarias y autóctonas”, expresó el Mandatario, que recordó que de niño bailó
danzas de este tipo en su comunidad. Las danzas autóctonas de distintas zonas
del Departamento de La Paz están relacionadas con el ciclo agrícola y son la
expresión icónica de los deseos de futuro de los campesinos.
DANZA DE LOS SURI SICURIS DE ITALAQUE
Al son de los instrumentos de viento, los comunarios del
cantón Taypi Ayca, Italaque, provincia Camacho del departamento de La Paz,
realzan la danza y la música de los sicuris en todas sus festividades a la
espera de que en algún momento su riqueza autóctona sea reconocida como
patrimonio cultural.
Una de las características de Bolivia es su gran riqueza
cultural dispersa por los nueve departamentos. Entre este tesoro se encuentra
la música y danza, que en varias oportunidades se convirtió en la bandera que
representa al país en el exterior. Con el transcurrir de los años se destapan
baluartes inimaginables que se revelan ante los ojos de la sociedad moderna.
Entre ellos tenemos a los sicuris de Taypi Ayca, que se encuentra a orillas del
río Sochi, Italaque, provincia Camacho del departamento de La Paz.
En Italaque, a seis horas de viaje desde la ciudad de La
Paz, se forman conjuntos de músicos desde tiempos inmemoriales.
Los vientos en la memoria de los ancianos.- Huanacu relatan
que los ancianos de Taypi Ayca comentaban que en una ocasión un viejo campesino
que retornaba a su casa sentía escuchar en las quebradas los sonidos singulares
y armoniosos del viento. Al día siguiente, el campesino empezó a construir un
curioso instrumento de viento, hizo caños de varios tamaños con los que formó
lo que hoy se conoce como la zampoña
Las esculturas, grabados, relatos y pinturas evidencian su
presencia en la cultura ancestral, que lo catalogan como uno de los primeros
instrumentos aerófonos utilizados por el hombre. Se estima que, en sus
orígenes, los sicuris deleitaban con sus sonidos melódicos a sus dioses y
achachilas, como el Mallku Antaña, Kimsa Wara Khone, Uyviri, Marani, Mallku
Kamañani, Mallku Huaquituma, Mallku Kawanani, Ticani, Huaypacayo y otros de la
región.
Aseguran que los mallkus nunca estuvieron subordinados,
incluso se valieron de instrumentos musicales de percusión, como el bombo
grande, que producían un sonido tan fuerte que asustaba y atemorizaba
psicológicamente a los rivales. Es así que estos maestros son recordados hasta
hoy como guerreros que se resistieron al dominio colonial.
Durante la colonia con la llegada de la religión con los
españoles, los indígenas celebraban determinadas fechas religiosas, tales como
la festividad de Corpus Christi, de la Virgen del Carmen y de San Francisco.
Estas fechas eran asumidas como especiales y los sicuris debían amenizarlas con
sus instrumentos musicales.
Cada una de estas fiestas era celebrada por los comunarios
de acuerdo con su posición socioeconómica. Así, los prestes de las fiestas de
Corpus Christi y de San Francisco debían ser quienes tengan mayores recursos
económicos; en tanto que los pasantes de la Virgen del Carmen serían las
familias menos pudientes.
En la actualidad, los preparativos para cada celebración se
realizan con tres meses de anticipación, tiempo en que los pasantes reúnen las
vestimentas ancestrales que usará la tropa de sicuris en la festividad así
también prevén la preparación y maceración de 40 a 50 turriles de chicha de
maíz para el consumo durante la fiesta.
La vestimenta usada en esta festividad tiene sus propias
características. Los sicuris de la fila izquierda llevan en la cabeza un casco
de totora forrado con tela roja y con plumas de pariguana anaranjada, llamado
mochulli, además de cintas de colores, peluca negra y pañoleta blanca para la
cabeza llamada phike chukha, en el cuerpo llevan un saco de color negro tejido
con lana de oveja, un camisón blanco de bayeta de oveja con cuello tipo cadete,
un capacho multicolor con figurillas tiwanacotas y su respectiva chuspa con
coca, cigarro y llujta.
La vestimenta continúa con una chacana de un metro
construido con palitos de kiswara y plumas de una variedad de colores de loro,
que significa la bandera o wiphala del Tawantinsuyo; un ponchillo rojo con
revete blanco llamado khawa. En la mano derecha una peleta de medio metro para
golpear el bombo y en la mano izquierda un sicu, de la cintura para abajo,
visten un pantalón negro con botapiés anchos con vivo blanco y apertura hacia
atrás, un pollerín blanco con pliegues entallados a la cintura, y en los pies un
par de abarcas blancas con antenas.
Por su parte, los sicuris de la fila derecha llevan en la
cabeza un lluch’u verde o rosado con mostacilla tejido con lana de oveja, una
peluca hecha con la cola del toro negro, una pañoleta blanca, un sombrero
grande de copa alta. En el cuerpo, tienen un camisón blanco de bayeta de oveja
y un saco negro tejido con lana de oveja, un capacho multicolor con figurillas
de Tiwanaku con su respectiva coca, cigarro y llujta.
Dos ponchos de color rosado y verde de lana de oveja, una
pañoleta de medio metro cuadrado llamada jaconta que se coloca sobre los
ponchos. Un bombo grande hecho de citro cuelga de forma cruzada hacia el lado
izquierdo de su cuerpo. En la mano izquierda sostienen un sicu o zampoña y en
la derecha un palito de medio metro para golpear el bombo. De la cintura para
abajo tienen un pantalón negro hecho de bayeta de oveja. En los pies calzan
unas abarcas blancas con antenas.
En la fiesta de la Virgen del Carmen, que se realiza los
días 15, 16 y 17 de julio, los prestes o pasantes mayores proceden de familias
pobres. Aunque existe la ayuda recíproca de familiares con el grupo de sicuris;
la diferencia es la melodía y posición económica del preste mayor.
En la fiesta de San Francisco, celebrada el 4 de octubre,
los prestes mayores festejan una semana completa. Las familias más ricas, los
k’amiris, pasan con el mismo grupo de sicuris. Esta festividad se diferencia de
las otras por la vestimenta, melodía y posición económica.
Los sicus.- El sicu es un instrumento construido con cañas
de carizu, también llamada choquemama; consta de siete pares de tubos, cada par
está conformado por un ira y un arca.
La materia prima de este instrumento se produce en zonas
cálidas y templadas de nuestro país. Zongo, Quime, provincia Inquisivi, y
Bautista Saavedra, en el departamento de La Paz, son algunos de los lugares
donde se puede encontrar este material.
El sicu ira, que significa primero, tiene siete tubos, pero
de todos ellos sólo trabajan seis. El sicu arca, que significa segundo, consta
de ocho tubos; a diferencia del ira todos los tubos trabajan en la
interpretación de las melodías. El ira es el que empieza y termina en todas las
melodías; el arca es el que acompaña. El grupo de sicuris consta de siete
pares: los dos primeros se denominan guías y tras guías, los tres pares
siguientes son kallo ira y mala arca y los dos últimos pares son soli iras y soli
arcas. Así los sicus deben estar dirigidos por un guía que se ubica en la parte
derecha del grupo. En su ausencia, el guía es el de la izquierda. Para ser guía
se debe tener gran experiencia y conocer la mayor cantidad de melodías; por
ello, los guías son personas de edad avanzada.
Toda persona admitida en el grupo de sicuris tiene que
empezar desde soli iras o soli arcas, y a medida que avanza en la
interpretación del instrumento los guías lo suben de categoría, es decir que
pasa de soli a kallo ira, luego a mala arca y por último a guía, después de dar
un examen de idoneidad en el grupo.
DANZA DE LA KHANTU
Tiene un carácter ceremonial ligado a los ritos y ceremonias
de los kallawayas por lo que en su música se ejecutan el siku, la wankara, el
chinisco y el pututu, aparece en el Carnaval de Oruro, Obra Maestra del
Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, recién en 1989 como tarqueada,
luego en 1994 se funda oficialmente el conjunto Khantus "Sartañani".
Tiene sus orígenes en el occidente de Bolivia,
específicamente en el departamento de La Paz, en la región de Charazani, por su
interpretación y por el tipo de melodías se presume que es más de carácter
ceremonial de diferentes índoles y motivos que realizaban los kallawayas y por
ende las costumbres y manifestaciones de los pueblos, este baile se realiza en pareja, por la concepción
de la dualidad complementaria de género existente en las comunidades. El
movimiento de los danzarines y las coreografías, son similares a los
movimientos del katari o víbora, en forma de "S". Los participantes,
sujetos de la mano en parejas, avanzan al son del bombo.
Más que una danza, el khantu es una ejecución musical de
huayños y tonadas del altiplano acompañados con zampoñas o flautas de pan. La
pareja en la danza del khantu revaloriza la organización social andina haciendo
énfasis en la dualidad de chacha - warmi (Hombre - Mujer).
Entre sus personajes están:
Ñusta: Generalmente lleva la wiphala, puesto que representa
sangre real, preparada para ser presentada y sacrificada al Dios Inca. Ellas
representan a las mujeres destinadas al matrimonio con algún miembro de la
familia real, dedicadas al cuidado y atención de su familia, y al tejido. La
ñusta lleva también la wiphala, como símbolo de los pueblos indígenas en la peregrinación
que se realiza el sábado de Carnaval hacia el Santuario de la Virgen del
Socavón.
Wiphalero: Tiene sus propias características, utiliza un
sombrero de Charazani hecho de lana de oveja de color blanco, un
"ch’ullo" (gorro) largo icónico que cubre hasta las orejas tejido con
lana de oveja, una almilla o camisa de mangas largas en color blanco con cuello
cadete y un pantalón.
También llevan un poncho de color rojo que cubre el cuerpo
del frío, llevan un "chumpi" (faja), de color rojo el cual tiene figuras
geométricas en forma de los astros, medias hechas de qaytu (lana hilada sea de
oveja o llama) de color blanco, abarcas hechas de llantas. Se encarga de agitar
la wiphala.
Charasani, es una localidad y municipio de Bolivia, capital
de la provincia de Bautista Saavedra, en el departamento de La Paz a una
altitud de 3250 msnm. Fue fundada por decreto supremo de 23 de diciembre de
1826 por el Mariscal Antonio José de Sucre, Presidente de Bolivia. Entre sus
mayores atractivos turísticos se encuentran la fiesta patronal celebrada el 16
de julio conmemorando la festividad de la Virgen del Carmen, la corrida de
toros celebrada el 6 de agosto y las aguas termales que se encuentran a 4 km de
la población.
Cultura y Música, en la cultura de Charasani destacan: la
medicina o farmacopea tradicional herbolaria, que goza de gran reputación desde
la época de los incas. Asimismo, las diversas expresiones musicales propias de
la región como los Khantu, que se interpretan en bandas de flautas de pan
andinas, con melodías y ritmos muy peculiares, que solo se escuchan en esa
región y se caracterizan por el uso de varios bombos y el empleo del triángulo
que va marcando un compás ceremonioso y marcial, lo cual los diferencia mucho
de otros ritmos y estilos musicales andinos afines como los Italaque o los
sicuris aymara.
El vestuario, en las artes escénicas, es el conjunto de
ropas, complementos y accesorios que utilizan los actores para representar a un
personaje en específico, el vestuario es famoso por ser parte de grandes representaciones
a lo largo de todo el mundo en diferentes escenarios y en diferentes obras. El
director teatral y constructivista ruso Tairov lo describió como "segunda
piel del actor". El diccionario simplifica la definición de la acepción principal
de esta voz: "Vestimenta necesaria para la representación de un
espectáculo". Y anota otras acepciones relacionadas: El vestuario como
lugar o espacio donde se visten los actores, y antiguamente, la escenografía.2
La tropa de Sicuri,
es el nombre que se le da al tradicional grupo de músicos que tocan el
siku, instrumento de viento andino. El nombre se debe a la palabra del idioma
aimara sikuri, que alude al tocador de siku y por añadidura al género musical y
a la danza de estas agrupaciones.
El siku, es un instrumento de viento de un conjunto de
cañas, que se utiliza en el altiplano, la denominación proviene de la voz
aymara siktasiña que quiere decir 'preguntarse' o 'comunicarse', actividad
humana social y natural del hombre altiplánico. Este instrumento también se le
conoce como zampoña y en el idioma quechua se le denomina antara. Los sikus
provienen de los instrumentos tubulares usados por antiguas culturas
precolombinas, similares a las flautas de pan.
El bombo el chhinisco, es un instrumento musical de percusión
membranófono, de timbre muy grave aunque de tono indeterminado. Debido a su
sonido grave, se usa habitualmente para marcar y mantener el pulso en diversos
estilos de música. Este bombo posee un gran espectro dinámico y poder sonoro, y
puede golpearse con una gran variedad de mazas y baquetas para lograr diversos
matices o efectos. Además, el ataque o modo de iniciarse el sonido y la
resonancia o vibración del instrumento influyen en su timbre. Las técnicas de
ejecución incluyen diferentes tipos de golpe como el legato o stacatto, al
igual que efectos como redobles, apagado, golpeos al unísono o notas de gracia.
Desde sus orígenes es además habitual su empleo junto a los platillos.
En el ámbito orquestal, el bombo evolucionó hacia medidas
notablemente mayores, hasta llegar a tamaños de más de dos metros de diámetro,
y se suspende en un soporte diseñado para posicionar el instrumento libremente.
Por su parte, el bombo de marcha se mantuvo en medidas más pequeñas, adecuadas
para poder cargar con el instrumento mientras es tocado, y se benefició de la
introducción del plástico en los parches por sus mejores condiciones frente a
cambios atmosféricos. Por otro lado, la invención a principios del siglo XX del
pedal para golpear el bombo dio lugar al bombo de batería, parte fundamental de
dicho instrumento.
DANZA DE LA TARQUEADA
La Tarqueada es uno de los vehículos de expresión de las
creencias e ideales de los pueblos aimaras de Bolivia. Esta fiesta gira en
torno al acto profano en la Machaka Chojke (chajlla de la papa nueva) es en la
Anata (Diversión), que es practicada desde la navidad hasta carnaval, tiene un
significado ritual de súplica, en que sus melodías la recibe de la naturaleza,
para pedir clemencia, de la misma naturaleza, para la llegada de la lluvia, o
cualquier otro fenómeno climático que afecten a las cementeras y finalmente es
con este instrumento que festejan la Anata en este tipo de reuniones sociales
de chajlla anhelando, buena producción y abundancia de víveres.
Significado de nombre, Tarka: o Anata (voz quechua),
significa sonido ronco, es a su vez un instrumento de carácter aerófono que
pertenece a la familia de las flautas de sonido ronco. En el diccionario de
Ludovico Bertonio, encontramos que “Tarcaca cunea - amaya cunca quekhayu” que
quiere decir voz ronca.
Danza. La danza o baile con este instrumento es la
Tarqueada, precisamente se la baila en la Anata o carnaval andino, donde se
manifiesta la alegría diversión y juegos. El baile es de figuras fijas con
pasos saltados y que se baila en parejas, haciendo genuflexiones hacia delante,
dando vueltas al final de cada giro musical, siguiendo en fila el movimiento
del círculo.
La danza se realiza alrededor del círculo de los músicos en
sentido contrario entre hombres y mujeres, donde al son de la Tarka se hace esa
fiesta andina tan diferente en sus motivaciones y en sus creencias.
Material de construcción, La Tarka está constituida de un
material especial sólido pero diverso: El Tarku - Sabo - Salvo, el naranjo,
granadino o mará y se construye de tres tamaños:
El liku o
tayqa (el más largo)
La mala o
malta (mediano) y
El chili
(pequeño).
Las medidas del instrumento Tarka varia desde 46 a 64 cms.
de acuerdo a las particularidades de las comunidades. La Tarka es muy conocida
con el nombre de pinkillo y flauta, la parte superior tiene un tarugo que se
conoce como boquilla que tiene una abertura a través de la cual se sopla el
aire, la parte media inferior tiene seis orificios para la digitación de los
dedos.
Vestimenta, puede varíar según la región, es elaborada con
lana de oveja, tejido o tela conocido como “bayeta de la tierra”, que a su vez
está siendo sustituida por telas o prendas de fábrica.
Vestimenta de varón, Lluch'u (gorro); camisa o kawa (camisa
de bayeta o tocuyo); pantalón (bayeta negra); wak'a (faja de color); wiskhu
(abarca); wist'allá (bolsa para coca); chuspa (coca) k'orawa (honda); awayu;
(para cargar).
Vestimenta para la mujer, Tanka o tankara (sombrero);
mankhancha (enagua o combinación); almilla (camisa de bayeta); urkhu (traje
negro especie de pollera) yapisa (faja delgada); wist'allá (para llevar coca);
awayu (tejido para cargar); inkuña (pañuelo o servilleta para coca); tullma
(ornamento para el cabello); phisu - tupu (prendedor); culebra o colibrí (cinta
tejida), wiskhu (abarca).
DANZA DE LA QUENA QUENA
Origen, Es una danza de origen prehispánico, considerada
como una danza de la nacionalidad colla, guerreros por excelencia, en su
indudable carácter marcial, difundido en el departamento de La Paz.
La danza de Quena quenas en la provincia de Jesús de Machaca
solo se toca al inicio del verano (lapaka pacha )para llamar las lluvia
de esa forma dar un buen inicio
de siembra para una buena cosecha, es una danza que sobrevivió muchos años manteniendo la verdadera
identidad del aymara, por
eso cada primer domingo de octubre se celebra esta fiesta encabezada por los
Jach’a Mallkus quienes son los que guían
y protegen los 27 suyus, para una vida en reciprocidad con la madre tierra y con toda la sociedad.
Los sayañas son espacios donde se reúne y se comparte, hay
dos clases de sayaña en Jesús de Machaca; una es alrededor de la plaza y otra
es en la plaza, la sayaña de alrededor es el espacio para reunirse,
compartir un apthapi y luego organizarse
para la demostración de la danza de Quena quena, antiguamente esta sayaña
servía para organizar reunirse y organizar los cercos en contra de los patrones
y hacendados que daban mal trato a los comunarios.
La otra sayaña que está
justamente en la plaza central, es para unirse y ch’allar, es decir,
celebrar la unidad de los suyus y reconocerse propios y hermanos, antiguamente se celebraba y ch’allaba en este
lugar el triunfo sobre los patrones y de
esa manera seguir manteniendo unidos los 27 suyus.
Vestimenta, Esta danza es monótona, se muestra poco
brillante, donde el bailarín esta ataviado con una coraza de piel de tigre
conocida con el nombre indígena “khawa”, se asemeja a la armadura utilizado por
los conquistadores; en la cabeza sobre el sombrero de copa baja lleva un
aditamento circular con plumas de ave, el llaitu, en la cintura lleva colgados
otras hileras de plumas, que es la “chaana”, conformado un atavió importante.
También existen algunas variaciones regionales como el quena
quena de Umala, donde la coraza esta trabajado en plata, repujados y cincelados
exquisitamente, o el quena quena de ayata en el que la coraza ha sido
totalmente trocada por una especie de manto blanco.
Danza, Coreográficamente presentan dos figuras clásicas de
los bailes guerreros: el “Iroa” y el khairu” o sea el ataque y la defensa.
Generalmente los danzarines se hallan representados en
hileras, siempre de frente, con poco movimiento, donde ostenta el temperamento
y personalidad física, con sus instrumentos quejumbrosos, con bombos y tambores
de distintos tamaños para llegar con su fe y sus costumbres hasta los altares
bendecidos en templos de pueblos.
CONCLUSIONES
Las danzas autóctonas son estilos de baile creados en una determinada región y que representan la cultura de las personas que habitan allí, no se
limita a bailes arraigados en la cultura por cientos de años, aunque el término
suele referirse a estos.
Los bailes autóctonos de cada región pueden representar la
cultura tradicional y la cultura actual del país al que pertenecen. Diferentes
países tienen apreciaciones distintas de los tipos de bailes que pueden ser
considerados como autóctonos, pero en general se utiliza este término para
abarcar todo estilo de danza tradicional o folclórico.
El estilo de estas danzas usualmente vienen acompañados de
música tradicional y quienes lo bailan tienen poco o nada de práctica
profesional por ello son baile que no están diseñados para realizarse en
teatros o presentaciones grandes y su ejecución está ligada a una tradición intercultural
más que a la innovación, siendo esto último irrelevante en la danza autóctona.
El término de danza autóctona o tradicional está ligado
hasta cierto punto con la tradición, dado que en general son bailes que
existían cuando las diferencias sociales entre los distintos estratos estaban
más marcadas, y el baile y música autóctona era visto más comúnmente entre
personas pertenecientes a las clases populares.
Por ello Bolivia tiene una gran diversidad de expresiones
culturales a lo largo de todo el territorio, existe una variedad de danzas
autóctonas y folclóricas que demuestran nuestra diversidad cultural.
La inclusión o exclusión de instrumentos en los conjuntos
define una cierta pertenencia social. Entre los indígenas se percibe la
preeminencia de los instrumentos de viento y percusión por sobre los de cuerda,
como el arpa y el charango, que aparecen con mucha menos frecuencia en las
fuentes.
Como se puede evidenciar este tipo de danzas aun son
practicadas en muchas comunidades del mundo y se han conservado durante siglos
o un periodo de tiempo considerable, junto con sus elementos originales: pasos,
ritmos, trazos coreográficos e interpretación, por ello que debido a sus
características son representadas o ejecutadas
por descendientes de las antiguas culturas o civilización como representadas o
ejecutadas por descendientes de las antiguas culturas o civilizaciones.
A estas danzas autóctonas también se les denominado como
danzas tradicionales u originarias y por este nombre también se les ha menospreciado
un poco, pensando que son sencillas y que cualquiera las puede ejecutar sin
ningún problema, sin tomar en cuenta que tiene una gran complejidad y no son
cualquier pieza de tipo convencional.
En general este tipo de danza están enfocadas o parten de un
ritual caracterizado por diferentes acciones, mismas que tienen relación con el
medio ambiente y la producción, entre otras, expresándolas como un medio de
comunicación que ha traspasado las barreras culturales, políticas y étnicas,
influyendo fuertemente las nuevas generaciones o en los artistas urbanos, por
ello se puede identificar con la siguiente frase:
“QUIEN OLVIDA Y NIEGA SU ORIGEN Y SUS RAICES, PIERDE SU
IDENTIDAD”
RECOMENDACIONES:
Luego de haber definido y llegar a la conclusión sobre algunas
danzas autóctonas de nuestra querida Bolivia una de las recomendaciones
fundamentales es buscar estrategias de preservación y revalorización de danzas
que ya se están extinguiendo en esta modernidad, ya que no hay que olvidar que
las Naciones y pueblos indígenas originarios
ya están reconocidos en nuestra Constitución Política del Estado y en el
Art. 31 afirma que serán protegidas y respetadas en su forma de vida
individual y colectiva.
Tomando en cuenta esta afirmación se propone las siguientes
estrategias para poder preservar las danzas autóctonas como una identidad
cultural:
* Fomentar
las entradas de danzas autóctonas en diferentes fiestas patronales de nuestras
regiones o comunidades de nuestra patria como medio de convivencia social con
otras comunidades.
* Fortalecer
el desarrollo de estas danzas en las Unidades Educativas para que nuestros
estudiantes practiquen y conozcan la diversidad cultural de nuestra patria.
* Implementar
talleres de manejo de estos instrumentos nativos en diversas espacios,
revalorizando nuestras danzas como una identidad cultural
* Con ayuda
del Gobierno Municipal se pueda fortalecer el desarrollo de estas danzas así
como las entradas del Gran Poder.
Ya que en el Art. 99 de la C.P.E. afirma que “La diversidad
cultural constituye la base esencial del Estado Plurinacional Comunitario. La
interculturalidad es el instrumento para la cohesión y la convivencia armónica
y equilibrada entre todos los pueblos y naciones. La interculturalidad tendrá
lugar con respeto a las diferencias y en igualdad de condiciones”.
Así mismo en el Art. 101” Es patrimonio de las naciones y
pueblos indígena originario campesinos las cosmovisiones, los mitos, la
historia oral, las danzas, las prácticas culturales, los conocimientos y las
tecnologías tradicionales. Este patrimonio forma parte de la expresión e
identidad del Estado”.
por: Wilmer Ataucuri Apaza.
Elias Enrique Yujra Huanca,
Jose Mendoza Beltran,
Julio Limachi Coquendo,
Beatriz Martha Sirpa Mamani
por: Wilmer Ataucuri Apaza.
Elias Enrique Yujra Huanca,
Jose Mendoza Beltran,
Julio Limachi Coquendo,
Beatriz Martha Sirpa Mamani