LOS
DERECHOS DE LA NATURALEZA
Los derechos de la
naturaleza son de suma importancia para
las futuras generaciones, es nuestra obligación cuidar de ella.
Ley número 071 de 21 de
diciembre de 2010 de Derechos de la Madre Tierra tiene por objeto reconocer los
derechos de la Madre tierra, así como las obligaciones y deberes del Estado
plurinacional y de la sociedad para garantizar el respeto de estos derechos.
La naturaleza es
inagotablemente sostenible si cuidamos de ella. Es nuestra responsabilidad
universal pasar una tierra sana a futuras generaciones.
Bolivia es un país rico en
su flora y fauna, tenemos el privilegio de disfrutar diferentes climas, su
biodiversidad es un claro ejemplo de una lucha constante para poder mantener la
naturaleza en las mejores condiciones.
Los derechos de la
naturaleza, que son de toda una novedad en el constitucionalismo mundial, desarrollan
los derechos que tiene la naturaleza en el territorio Boliviano.
La esencia de los derechos
fundamentales de la persona y en particular el derecho a la vida constituyen un
hecho que no puede ser concedido ni derogado por ningún acto o poder humano,
pues estos derechos, tienen su fundamento no en un acto de la voluntad humana
si no en la misma naturaleza y dignidad de la persona.
La persona humana viviente
es un sujeto de derecho, el mismo del que puede predicarse, la vida es una noción
abstracta. Los que existen no son los vivientes, es decir, sujetos que realizan
la perfección que llamamos vida.
Si nos preguntamos cual es
el fundamento del derecho a la vida, la respuesta está en que el hombre es
persona tanto desde el punto de vista jurídico como ontológico. La vida es un derecho atribuido a la naturaleza del
hombre en cuanto persona.
Nuestra constitución refiere
que la naturaleza o Pacha Mama, es un lugar donde se reproduce y realiza la
vida, por lo tanto tiene derecho a que se respete su existencia y mantenimiento
y regeneración de sus ciclos vitales, estructura, funciones y procesos
evolutivos.
Cuando se habla de los
Derechos de la Naturaleza, significa reconocer que los ecosistemas y las
comunidades naturales no son simplemente propiedad que puede ser poseída, sino
que son entidades que tienen un derecho independiente a existir y florecer.
La situación de los recursos
naturales sigue siendo preocupante, persisten muchos problemas tales como la
deforestación y la pérdida de biodiversidad, y las medidas de restauración o
remediación ambiental son totalmente insuficientes por eso el saldo neto es un
creciente deterioro ecológico.
Los seres humanos tienen la
autoridad legal y la responsabilidad moral de hacer cumplir estos derechos en
representación de los ecosistemas. El ecosistema por sí mismo puede ser
considerado como el defendido por todas y cada una de las personas que
reflexionando con respecto a la vida de nuestro planeta, y no permitiendo la
destrucción del mismo estamos inmerso en llevar a la realidad estos derechos
constitucionales, en la actualidad tenemos el reciclaje que si bien es cierto
se fomentó con el valor económico, vemos en las calles y en todo lugar
reciclado, son personas que están trabajando y de este modo se ayuda a nuestro
ecosistemas, además en los lugares públicos hay recipientes recolectores,
especificando los deshechos, los organismos descentralizados (municipios) a
nivel nacional han dispuesto que todos los locales e instituciones que se
dedican al comercio tengan un tacho de basura y a los ciudadanos y ciudadanas
que no saquen la basura sino en horarios establecidos para el recolector de
basura. En la actualidad, muchas campañas de conservación se basan en criterios
ecológicos o estéticos, pero la mayoría apela a demostrar la utilidad de los
recursos naturales, y por lo tanto son utilitaristas (en muchos casos referidos
a los valores económicos). Se defienden ciertos sitios o especies invocando su
utilidad económica, como sucede con los llamados a proteger variedades nativas
de plantas y cuencas altas de los ríos. En estos casos la naturaleza es
defendida por que hay una utilidad para los humanos.
Los Derechos de la
Naturaleza y derecho a su restauración
generan las nuevas políticas de gestión ambiental basado en la buena
vida (sumak kausay), creando una nueva estrategia de desarrollo. La
incorporación de temas ambientales que incluye los derechos de la naturaleza,
donde la PACHA MAMA, tiene derechos que se respete íntegramente su existencia y
el mantenimiento y regeneración de siclos vitales estructura, además hay que
recordar que somos parte integral de la naturaleza.
La restauración de la
Naturaleza es independiente a los individuos y colectivos que dependan de los
sistemas naturales afectados. Pero este reconocimiento a la naturaleza, a
afectado a poderosos intereses corporativos e inclusive dogmas jurídicos que
todavía no aceptan la evolución del derecho. Por lo que hemos podido apreciar
el Estado está adoptando medidas necesarias para eliminar o mitigar las
consecuencias ambientales nocivas.
BIBLIOGRFIA:
Hacia a una cultura de la naturaleza. Antonio Nuñez
Jimenez